Esta pequeña mención para agradecer a todos los que participan de Compartir Pensamiento, ya sea comentando en el blog u otros ámbitos, leyendo o simplemente curioseando cada tanto.
Lo importante no es la cantidad sino el ejercicio de poder intercambiar ideas. Sin dudas es la mejor alternativa para crecer como seres humanos en forma colectiva.
Un saludo enorme y por muchos... pensamientos más por compartir!!
Blog creado para compartir razonamientos, ideas, inquietudes, propuestas, reflexiones, sueños, etc. En términos generales, todo lo que pensamos en la búsqueda de entender lo que vivimos para convertir al mundo en un lugar mejor...
domingo, 30 de agosto de 2015
viernes, 14 de agosto de 2015
1.000.000 de votos en blanco no son noticia
Habiendo 11
agrupaciones a nivel Nacional y a su vez con sus respectivos candidatos de
interna, 1.000.000 de personas decidieron votar por ningún candidato.
Con el
respeto que me merecen los partidos progresista, de izquierda, entre otros, la
cuarta fuerza nacional fue el voto el blanco, eso dice mucho.
Nos
enorgullecemos si para una causa solidaria, manifestaciones políticas, o de otra índole
juntamos 1.000.000 de personas o firmas, pero no nos horrorizamos si tenemos esta
cantidad de votos en blanco.
(Recordar que
son personas que fueron al lugar de votación para no votar, no esta incluido
las personas que ni fueron).
Y me
pregunto ¿cuáles pueden ser las razones?
Las
respuestas que encontré fueron, protesta, ignorancia, desinterés e inconformismo, seguramente puedan decirme más.
Como
protesta creo que es muy poca la proporción pues suele ser un mecanismo usado
por agrupaciones cuando quedan por fuera de la votación, pero tratándose de las
PASO no es el caso.
Ignorancia, la de desconocer los candidatos y por ende no querer
elegir uno sin saber, aunque es una decisión sensata, no es bueno que otros
decidan por uno debido a no saber.
Desinterés,
tiene que ver con pensar que no va a afectar lo que se decida a la vida
personal. Un error muy grande, podría darse más frecuentemente en gente que tiene la vida resuelta, por inmadurez o que su realidad cotidiana esta demasiado alejada de la temática política.
Inconformismo, es entendible si se observa que la mayoría de los problemas estructurales del
país después de varias décadas no se han solucionado, pero tampoco es coherente
esperar un candidato ideal o un sistema ideal para participar. El sistema
democrático y los candidatos tiene sus imperfecciones en la realidad, pero
entre las opciones para votar hay bastante diversidad como para no encontrar alguna
agrupación a la cual uno prefiera dar su voto por sobre otra.
Si conocen a
alguien que votó en blanco (1 de cada 20 así que seguramente sí), pregúntenle por qué y si pueden, incentívenlo a que conozca
un poco más y tome un rol activo en las elecciones.
domingo, 9 de agosto de 2015
La Dicotomía de la Hormiga y la Cigarra
Existe
una vieja cultura, conocida mayormente
con el nombre de “Cultura del trabajo”. La misma es aplicable con las
particularidades de cada caso, a todas las clases sociales.
Esta
cultura brinda cierto sustento ético a determinada manera de accionar. Revaloriza
el compromiso por una actividad para obtener una merecida retribución, la
puntualidad como símbolo de respetar el tiempo de los demás, la constancia como
herramienta para el beneficio colectivo, etc.
Existe
otra corriente, también aplicable a distintas clases sociales.
Esta
corriente se basa en una interpretación “Utilitarista e individualista de la
realidad humana”.
Recomiendo leer: Cuentos políticamente incorrectos - James Finn Garner |
Plantea
como bases la limitación del tiempo material que disponemos en el planeta, así como
de cada etapa de nuestras vidas, toma como base que el objetivo de una vida es
la felicidad y que no se puede lograr si uno no se toma tiempo para ella. Por
ello uno debe priorizar las aspiraciones personales por sobre otra cosa.
Probablemente
muchas personas versen su accionar sobre estas corrientes de pensamiento, aún
sin saberlo. A veces completamente y a veces alternadamente.
La primera cultura, es más tradicional en las clases trabajadoras. Tuvo un auge muy importante en los siglos pasados, pero este último tiempo se encontró con nuevas limitaciones. Algunas de ellas son, que ya no es retribuido como antes el trabajo bien realizado, que el estándar de vida llevo a las personas a trabajar para producir más de lo que pueden consumir, que la aparición del otro paradigma les mostró cómo también se puede ser feliz sin trabajar tanto, etc.
La
segunda es más nueva, o al menos amplió su masividad este último tiempo en el
mundo. Tiene un sustento fácil de asimilar y es bastante seductora porque
muestra en un horizonte cercano, un camino directo a la felicidad. Pero cuenta
con la complejidad de que no es siempre realizable pues depende de los medios
que se dispongan.
Además, si
todos nos comportáramos de esa forma, difícilmente pudiéramos subsistir de la
manera que lo hacemos. Ya que el accionar individualista suele reposar sobre un
colchón de comportamiento colectivo que le da una base para accionar. Ej: Si
todos quisiéramos vivir de vender pulseritas, tocar canciones en los trenes,
viajar y conocer el mundo, básicamente no habría gente que se dedicará a que
funcionen los trenes para que viajemos, a que hubiera producción de plásticos
para las pulseras, a que hubiera cientos de cosas que nos facilitan vivir.
En
resumidas palabras, si todos fuéramos individualistas buscando como único
objetivo nuestra propia felicidad no podríamos vivir en sociedad, sería una
anarquía lisa y llana.
Pero
como en la realidad existe la diversidad, es una alternativa de vida que se usa
y cada vez más.
¿Acaso
yo dispongo de la sabiduría para decir cual camino es el correcto?
No, de
hecho no tiene porque haberlo.
Es
importante recalcar que la cultura que va adquiriendo una persona es en su
infancia determinante en muchos casos. Es por esto que tampoco es seguro cual
sería el natural devenir de un individuo sin estas influencias. Probablemente
el resultado sea un comportamiento de supervivencia más que otra cosa, pero no
está mal que los antecesores le brinden a sus predecesores un legado fruto de
la experiencia para lograr un comportamiento colectivo más “sofisticado”.
Habiendo
aclarado esto, es evidente que aunque para ambas corrientes la búsqueda de la
felicidad pueda ser un objetivo común, según cómo se hayan formado, para
algunos se alcanzará trabajando eternas jornadas, con la dignidad que eso
amerita y asegurando el bienestar de seres queridos y para otros teniendo la
libertad de viajar por el mundo no siendo esclavos de responsabilidades
estresantes en pos de una prosperidad económica efímera como lo bienes que se
pueden obtener con ella.
Y en el
párrafo anterior resumí mucho, de que trata esta dicotomía. Que no tiene
respuesta o solución. Que termina siendo la decisión de cada uno con sus pro y
contras, con los matices que se quieran tomar.
Habrá
que repensar bien que nos hace felices y sobretodo, en que medida...
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